Ella es de aquellas amigas, que nunca pensaste que no estaría más. La conocí en el cole... iba un grado abajo del mío... vivía a la vuelta de mi casa y yo nunca me di cuenta de que estudiaba en el mismo cole hasta que me gradúe.
Venía a mi casa porque no entendía la ley de los impuestos... y yo recién empapada de la teoría se la enseñaba con un gusto tremendo. Había descubierto una amiga, de pronto, tenía una cómplice más, a mis alegrías. Y nos hicimos buenas migas... hablando yo de mi viaje a USA, ella de su viaje a Londres, puntos en común que entrelazabamos con la excusa de ser amigas...
Rara y extraña amistad. Nos veíamos una vez cada cinco o seis meses, porque luego la vida se encargó de cada una... yo sabía de ella porque trabajaba de auditora en diferentes empresas, pero cuando nos veíamos, sonreíamos y volvíamos a hacer click.
Hace poco me contaron que se fue también... por el cruento camino del asesinato impune... muchas balas cegaron su vida, cuando regresaba de una fiesta... acto cobarde que dejo en la soledad a su hijo... y las lágrimas eternas de una madre que la recuerda...
¡A tí Sheny mi homenaje!
2 comentarios:
Que manera tan mágica de narrar lo que podría ser un hecho cotidiano.
Gracias nenita por estas historias de vida tan fantásticas.
Te quiero!
Sil
Gracias a ti preciosa
por visitarme y leerme!
un beso
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